Cuando las temperaturas se desploman y el invierno aprieta, las expresiones coloquiales para describir el frío se multiplican. En distintas zonas de España es habitual escuchar que “hace un frío pelao”, que alguien está “helado hasta los huesos” o que “hace un frío que corta” . Sin embargo, la Real Academia Española (RAE) recuerda que existe una forma adecuada y plenamente normativa para expresar que el frío es extremo.

Dos superlativos válidos según la RAE

La institución explica que el adjetivo frío admite dos superlativos correctos: «frigidísimo» y «friísimo» . El primero conserva la estructura heredada del latín, mientras que el segundo se forma sobre la base de la palabra actual frío y es el que hoy se emplea con más frecuencia.

Ambos, recalca la RAE , son válidos y pueden u

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