La cultura popular ha reconocido a Robin Hood como un forajido que, ante el incremento exacerbado de impuestos, el derroche y las injusticias del tirano Juan sin Tierra, optó por robar los recursos de los más ricos para entregarlos a los pobres.

Curiosa, e infantilmente, el Gobierno Nacional ha tratado de reivindicar esta figura a través de sus propuestas tributarias porque, a pesar de la narrativa, los proyectos de ley que se han presentado están lejos de garantizar justicia tributaria. Por el contrario, medidas como la reintroducción del...

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