Las autoridades estadounidenses incautaron un petrolero frente a las costas de Venezuela por transportar petróleo sancionado de origen iraní y venezolano . El barco, identificado como Skipper y con bandera de Guyana , formaba parte de una “ red ilícita de transporte de petróleo ” utilizada para financiar actividades de organizaciones terroristas extranjeras (FTO) , según confirmó la fiscal general Pam Bondi .

Una operación conjunta de seguridad nacional y control marítimo

La incautación fue ejecutada por agentes del FBI , la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional , la Guardia Costera y el Departamento de Guerra de EE. UU. Se trata de una operación estratégica autorizada por el presidente Donald Trump en el marco de su política de máxima presión contra el chavismo y sus aliados en Teherán.

En una publicación oficial en X, Bondi informó que se ejecutó una orden judicial vinculada a la violación de sanciones internacionales . El barco llevaba años incluido en listas negras por su uso reiterado en la exportación de crudo venezolano e iraní fuera del sistema financiero legal .

Vínculos con el terrorismo y la economía criminal

Según el director del FBI, Kash Patel , esta operación forma parte de un esfuerzo coordinado para “ asfixiar las finanzas de las organizaciones terroristas ” que operan en la región. En palabras de Patel: “Nuestros esfuerzos para aplastar a las FTO y cortar sus recursos continuarán día y noche”.

El crudo confiscado estaría vinculado a redes de lavado de dinero y narcotráfico operadas por el Cártel de los Soles , que el Departamento de Estado ha designado como organización terrorista extranjera . Parte de las ganancias estarían siendo derivadas a Hezbolá y otros grupos armados con presencia en Oriente Medio.

Trump: “Nos quedaremos con el petróleo”

En declaraciones a la prensa, el presidente Donald Trump defendió la operación y aseguró: “ Nos quedamos con el petróleo ”. La frase, lejos de ser simbólica, refuerza la doctrina estratégica de su Administración: intervención directa sobre recursos utilizados para financiar amenazas globales .

Trump ya había advertido que Maduro tiene los días contados y ha desplegado en las últimas semanas al grupo de ataque del portaaviones Gerald R. Ford frente a las costas venezolanas, junto con ataques selectivos contra buques cargados de narcóticos que intentaban cruzar el Caribe.

Un patrón de sanciones y operaciones marítimas

No es la primera vez que Washington actúa contra cargamentos ilegales vinculados al eje Caracas–Teherán . En agosto de 2020, el Departamento de Justicia incautó más de un millón de barriles de crudo vinculados a una organización de tráfico de drogas con destino a Venezuela. Aquella operación también derivó en el traspaso de los bienes confiscados a custodia federal .

La operación actual confirma la consolidación de un modelo de intervención preventiva , con base legal, que combina sanciones financieras, bloqueo naval y acciones judiciales contra los flujos ilícitos del petróleo sancionado.

España y la UE ante el uso del petróleo como herramienta geopolítica

La incautación del Skipper reactiva el debate sobre la necesidad de una respuesta coordinada desde Europa . Tanto España como la Unión Europea mantienen sanciones específicas contra dirigentes del régimen chavista, pero la inacción frente a las rutas logísticas del crudo sancionado deja espacio a redes criminales transnacionales.

Expertos del Real Instituto Elcano alertan sobre el riesgo de que los puertos del sur de Europa (en especial en el Mediterráneo) sean utilizados como puntos de entrada para productos derivados del crudo ilícito.

Soberanía energética sí, criminalidad internacional no

La energía no puede convertirse en el salvoconducto de régimenes que violan sistemáticamente los derechos humanos y financian estructuras terroristas internacionales . Las democracias occidentales, España incluida, deben asumir con claridad que el petróleo venezolano e iraní es parte de un conflicto global , no solo un asunto comercial.En tiempos de inseguridad energética, conviene recordar que la estabilidad no se construye tolerando el crimen , sino defendiendo la legalidad, la transparencia y los principios republicanos.