El Gobierno no va a esperar a la ansiada tregua meteorológica que permita empezar a controlar las decenas de incendios desbocados que siguen devorando hectáreas de terreno forestal a una velocidad récord y el próximo martes declarará “zonas afectadas gravemente por emergencia de protección civil” las áreas golpeadas por los devastadores fuegos. Un mecanismo que implica la activación del programa de ayudas del Ejecutivo central y que permitirá movilizar recursos adicionales no incluidos en los planes autonómicos. Algo que diversos barones regionales del PP llevaban reclamado varios días al presidente del Gobierno.
Así lo anunció Pedro Sánchez en su visita de ayer al puesto de mando de Jarilla, en Extremadura, donde volvió a pedir la implicación de toda la sociedad y de las fuerzas política