Tradicionalmente, los torreznos han sido vistos como alimentos poco recomendables para la salud cardiovascular por su alto contenido en grasas y sal. Sin embargo, un estudio científico publicado en 2024 sorprendió al demostrar que el consumo moderado de este alimento, frito en aceite de oliva virgen extra y acompañado de una dieta rica en fibra vegetal, no solo no empeora los parámetros metabólicos, sino que incluso podría mejorar algunos indicadores de riesgo cardiovascular en mujeres con sobrepeso no sedentarias.

Pero ¿acaso es esto suficiente para redimir a este icónico alimento? ¿Puede un producto tan ligado a la tradición tener cabida en un patrón dietético considerado como saludable?

Efectos del consumo de torreznos

Los torreznos de Soria están elaborados a partir de panc

See Full Page