Los puntos clave
El flujo silencia las distracciones y permite que tu cerebro sea creativo.
Las dudas sobre ti mismo pueden hacer que tu mente se fragmente, lo que podría bloquear el flujo.
Callar a tu perfeccionista interior puede ayudarte a concentrarte.
El flujo no está reservado solo para unos pocos: es una habilidad que se puede entrenar con la práctica.
Fuente: Ron Lach/Pexels
El concepto psicológico de “flujo”, acuñado por Mihaly Csikszentmihalyi, describe un estado mental de inmersión completa y concentración intensa en una actividad, que conduce a un rendimiento y disfrute óptimos.
Cuando estamos en un estado de flujo, nuestro autocontrol habitual se desvanece, las distracciones retroceden y los procesos de pensamiento creativo se hacen cargo.
Pero, ¿cómo se siente rea