Una empresaria e influencer brasileña, Caroline Aristides Nicolichi, de 26 años, se volvió viral en redes sociales tras revelar que no pudo cambiar el nombre de su hija en el registro civil tras arrepentirse del que había elegido.
La situación terminó en una fuerte discusión, denuncias cruzadas y hasta intervención policial.
Todo comenzó cuando Caroline y su marido, que viven en Indaiatuba , viajaron a la capital paulista para el nacimiento de su cuarta hija, el 6 de agosto.
Ese mismo día, escribió en sus redes: “Es oficial, nació Ariel y nuestro mundo está completo ahora”. Al día siguiente, en la propia maternidad, registraron a la beba como Ariel , al igual que el personaje de “La Sirenita”.
Sin embargo, a los pocos días, los padres se arrepintieron cuando notaron que debido