Zaragoza vivió este sabado el final del Vive Latino 2025 , un festival que durante dos jornadas llenó la ciudad de ritmo, cultura y color. La segunda jornada sirvió como despedida de un evento que, una vez más, convirtió a la capital aragonesa en punto de encuentro para miles de personas llegadas de distintos lugares, todas con ganas de vivir una experiencia compartida alrededor de la música.

La edición de este año se caracterizó por la intensidad del público , el ambiente vibrante en cada rincón del recinto y la combinación de propuestas que iban mucho más allá de los escenarios. Entre el calor de la tarde, la energía de la noche y la diversidad de actividades, el Vive Latino volvió a demostrar por qué se ha consolidado como uno de los festivales más importantes de Zaragoz

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