Un nuevo deslizamiento de material obligó al cierre total de la vía Bogotá–Villavicencio , uno de los corredores más importantes para la conexión entre el centro y los Llanos Orientales. El derrumbe se registró en el kilómetro 18, sector de Chipaque, y mantiene bloqueado el tránsito vehicular sin que hasta el momento se tenga una fecha estimada de reapertura.
La Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) informó que, como medida provisional, se recomienda a los viajeros utilizar la Transversal del Sisga. Sin embargo, esta ruta alterna presenta restricciones para vehículos de carga superiores a 16 toneladas y, en los últimos meses, ha registrado complicaciones que dificultan su uso continuo como corredor principal.
Por su parte, la concesionaria Coviandina explicó que su personal se