El infierno tan temido del desmoronamiento de todos los activos locales (acciones y bonos de deuda) y fuga hacia el dólar, en escena
Los mercados se tiñeron de rojo luego de la derrota aplastante que sufrió el gobierno en las elecciones de medio término en la provincia de Buenos Aires. Algunas acciones llegaron a caer más del 20 por ciento y los bonos soberanos se operaron con pérdidas de hasta más del 10 por ciento. El riesgo país terminó en torno a los 1100 puntos, según las estimaciones de privados, y el dólar oficial finalizó en 1425 pesos, con un salto de casi 50 pesos.
En el gobierno repitieron un discurso gastado: que los inversores tienen miedo a un cambio de signo político y reaccionan en forma desmedida vendiendo activos argentinos. Pero, en la práctica, los precios de las acci