El caso de la muerte de Valeria Afanador, una niña de 10 años con síndrome de Down, sigue sin resolverse tras 18 días de búsqueda. Su cuerpo fue encontrado por un campesino en el río Frío, en la zona rural de Cajicá, Cundinamarca. La última vez que se vio a Valeria con vida fue en su colegio, el Gimnasio Campestre Los Laureles, donde estaba bajo la responsabilidad de la institución educativa.
La familia de Valeria y su abogado han cuestionado al colegio, exigiendo respuestas sobre las circunstancias de su muerte. Aunque Medicina Legal determinó que la causa de muerte fue ahogamiento y no se encontraron signos de violencia física, persisten muchas dudas sobre el caso. Actualmente, se investiga si hubo algún tercero involucrado en la tragedia.
El abogado del colegio, Francisco Bernate, mencionó que la institución podría indemnizar a la familia a través de una póliza de seguros. Sin embargo, Julián Quintana, abogado de la familia, rechazó esta oferta. "Valeria no se reemplaza con dinero. No queremos pólizas, queremos justicia. Que la rectora y los profesores sean condenados por su homicidio", afirmó Quintana en la red social X.
Bernate, en una entrevista con La Red Viral, indicó que si se determina responsabilidad del colegio, se activaría una póliza de seguros que sería "bastante generosa". Aunque no reveló el monto exacto, aseguró que supera los nueve ceros y que fue renovada este año. Además, destacó que la póliza fue comunicada a los padres y a la comunidad para brindarles tranquilidad en caso de accidentes que pudieran ocurrir a los estudiantes.