La obesidad infantil y adolescente se ha convertido este 2025 en la forma más predominante de malnutrición en el mundo, superando por primera vez al bajo peso, de acuerdo con el informe “Alimentando el negocio: Cómo los entornos alimentarios ponen en peligro el bienestar de la infancia”, publicado por Unicef. Actualmente, uno de cada diez niños y adolescentes padece obesidad, sumando un total de 188 millones de menores entre 5 y 19 años.

Mauro Brero, asesor senior de Nutrición en Unicef, explicó que esto representa un cambio significativo en la forma de abordar la malnutrición. “Tradicionalmente, se ha trabajado en la prevención y tratamiento de la desnutrición, pero ahora la tendencia global apunta a un aumento de la obesidad”, señaló. Desde el año 2000, el bajo peso pasó del 13 % al 9.2

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