Lo que parecía la inminente designación de Juliana Guerrero como viceministra de Igualdad, por parte del presidente de la República, Gustavo Petro, podría estarse enfriando. Es una de las conclusiones que arrojaría el más reciente mensaje del jefe de Estado en sus redes sociales, que habría dejado abierta la posibilidad de que la funcionaria, cuestionada por la ilegalidad de sus estudios universitarios, no haga parte de su administración en la recta final de su mandato.
En respuesta a Roberto Mazzini, que indicó que había conocido de la orden -por fuente de Palacio- del mandatario, de posesionar a Guerrero como viceministra, así no cumpla los requisitos, Petro desmintió tal afirmación. Pero, además, lanzó una frase que podría ser entendida como un distanciamiento de la funcionaria que, ha