Seguro que lo has hecho, nos ha pasado a todos: acabas de preparar unos macarrones, escurres la olla y, sin pensarlo demasiado, viertes el agua hirviendo directamente en el fregadero . Un gesto tan cotidiano y aparentemente inofensivo que repetimos casi a diario. Sin embargo, esta práctica tan común puede tener consecuencias inesperadas en la fontanería de tu hogar , especialmente si tu instalación no está preparada para soportar temperaturas tan extremas.
¿Por qué no deberías echar agua hirviendo por el fregadero?
El agua del grifo en España, según el Ministerio para la Transición Ecológica, suele salir a temperaturas que rondan los 10-25 °C en invierno y hasta 30 °C en verano . Los calentadores domésticos, por su parte, están diseñados para calentarla hasta un máximo de 60 °C, au