Bruselas ha vuelto a rescatar de su retiro en Italia al expresidente del Banco Central Europeo (BCE) Mario Draghi para pedirle su opinión sobre el avance de la economía de Europa, pero su valoración de los avances implementados no es positiva. El exprimer ministro italiano se ha expresado con su franqueza habitual para abroncar a la Unión Europea, especialmente a los Estados miembros, por la “lentitud” con la que están implementando sus reformas económicas.
“Los ciudadanos y las empresas europeas valoran el diagnóstico, las prioridades claras y los planes de acción, pero también expresan una frustración creciente. Están decepcionados por la lentitud con la que avanza la UE”, ha criticado Draghi al principio de su intervención durante una conferencia con motivo del primer aniversario de s