La trayectoria de Robert Saleh como entrenador es una historia de destino, de resiliencia y de pasión. Para la afición, no es sólo un reencuentro con un rostro conocido: es el regreso del arquitecto de una muralla defensiva que marcó época. Saleh no sólo diseña esquemas; inspira, enciende y transforma.
Nacido en Dearborn, Michigan, en una comunidad orgullosa de su cultura y esfuerzo, aprendió desde pequeño que la grandeza se construye con disciplina. Jugó como ala cerrada en Northern Michigan, pero pronto entendió que su verdadera vocación estaba en la banda. Su camino no fue glamoroso: asistente de posgrado, coach de control de calidad, ayudante defensivo. Siempre detrás de escena, observando, aprendiendo, preparando. Lo que lo distinguió nunca fue la rapidez de su ascenso, sino la inten