Nuestros héroes dieron su vida y es merecido invocarlos. A la hora de su estudio, también es fundamental que las generaciones sepan de sus errores para que no se repitan y queden esos grandes vacíos de la memoria.
Ya se fueron los festejos el mes patrio, pero no sus reflexiones y genuflexiones.
Recordemos que la Independencia se consumó realmente hasta un 27 de septiembre, fecha anónima hoy, sepultada casi por la vocinglería del Grito de Dolores, las noches mexicanas, las pifias de los alcaldes y los chiles en nogada.
No hay mucho ánimo oficial de recordar la entrada triunfal de Agustín de Iturbide, sin librar ninguna batalla, a la gran metrópoli. Solo nos los recuerdan al mencionarse que el pícaro militar lo hizo pasar por la casa de su amante “La Güera Rodríguez” para que lo viese des