El Espanyol puso en evidencia que perder en el Bernabéu es algo normal, pero que, más allá de eso, está dispuesto a ser una de las revelaciones de LaLiga. Dejó escapar la victoria en casa o, mejor dicho, rescató un empate cuando parecía que llegaría una nueva derrota gracias a un cabezazo de Puado en la última jugada del partido . El gol hizo algo de justicia porque fue el equipo de Manolo González el que hizo todo por llevarse los tres puntos.

No se lo puso fácil el Valencia , que parece haberse repuesto bien de la goleada que le infligió el Barcelona . La mala imagen ofrecida, con enfado justificado de sus aficionados ha servido para enchufar al equipo, que ha logrado una victoria (ante el Athletic) y, ahora, un empate de mérito porque el estadio perico tiene pinta de

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