La Ley de Insurrección que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no descarta invocar para contener protestas en el país permite al mandatario desplegar al Ejército para reprimir episodios de desorden civil.

Aunque popularmente se la conoce como Ley de Insurrección de 1807, se trata en verdad de una amalgama de distintos estatutos promulgados por el Congreso entre 1792 y 1871, según subraya el Centro Brennan para la Justicia, un instituto de pensamiento no partidista que aboga por el Estado de derecho.

Esa normativa está considerada uno de los poderes de emergencia más contundentes.

Poder presidencial

En circunstancias normales, la ley Posse Comitatus prohíbe que el Ejército participe en actividades de aplicación de la ley civil. Invocar la Ley de Insurrección suspende tempora

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