La Argentina dio muestras de que el escenario que se plantearon los economistas hasta hace un par de meses quedó definitivamente archivado en un cajón.
Ya no solo hay puesto en las elecciones legislativas un mojón clave en el camino del proyecto libertario para proyectar lo que vendrá. No se trata únicamente de llegar al 26 de octubre próximo para determinar el futuro del plan económico.
El deterioro político que experimenta el oficialismo alimentó la incertidumbre en el mercado, la cual desembocó en una urgencia financiera de tal magnitud que hoy la meta es superar, siquiera, las próximas tres ruedas cambiarias sin tener que acudir al Banco Central para defender el techo de la banda.
Llegar con las frágiles reservas a resguardo hasta la cumbre que el presidente Javier Milei