**La campaña de Milei: ¿un eco del pasado?**

Javier Milei, presidente de Argentina, ha relanzado su campaña electoral a menos de 20 días de las elecciones legislativas. Durante su campaña hacia la presidencia, Milei utilizó eslóganes que resonaron con una parte del electorado, como "Una Argentina distinta es imposible con los mismos de siempre". Sin embargo, a casi dos años de su triunfo, este mensaje parece haber cambiado a "es imposible con lo mismo de siempre". Este giro se produce en un contexto de inestabilidad dentro del oficialismo, que busca cohesionar a su dirigencia y militancia.

El evento más reciente de Milei fue un espectáculo musical que, además de entretener, tenía como objetivo unir a su base de apoyo, que incluye a muchos con ingresos estatales. Este intento de revitalizar el entusiasmo se produce tras la derrota en Buenos Aires y el escándalo relacionado con José Luis Espert. Para ello, Milei repitió una estrategia que ya había utilizado en mayo de 2024, donde combinó un show musical con la presentación de un libro recopilatorio.

Sin embargo, la situación económica del país ha generado frustración entre la población. Desde mediados de año, la economía se ha estancado y el ingreso real no ha mostrado signos de recuperación. En este contexto, Milei ha vuelto a interpretar canciones como "Panic Show" de La Renga y "Demoliendo hoteles" de Charly, pero la recepción no es la misma que antes. Muchos ciudadanos que alguna vez tuvieron esperanzas ahora se sienten decepcionados.

El oficialismo ha enfrentado críticas por su respuesta a situaciones como el escándalo de Espert y la filtración de audios de Diego Spagnuolo, donde se percibe una reacción tardía y poco efectiva. Además, el presidente ha mantenido su apoyo a Espert, desafiando a otros miembros de su gabinete.

En el ámbito internacional, el equipo económico de Milei se prepara para un viaje a Washington, donde se espera que el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, y Donald Trump, ofrezcan respaldo a su gestión. Este apoyo temporal ha calmado a los mercados, aunque la incertidumbre persiste.

La pregunta que surge es hasta cuándo el gobierno podrá seguir con las mismas estrategias. ¿Se han agotado las soluciones creativas? Y, tras varios intentos fallidos en los últimos años, ¿hay espacio para un cambio significativo? Las próximas elecciones podrían ofrecer respuestas a estas inquietudes.