Los comerciales de pasta dental muestran a personas de sonrisas relucientes, de dientes blanquísimos , que dejan ver con orgullo a las cámaras. Sin embargo, en la realidad, muchas personas tienen dientes opacos u amarillentos, aunque tengan buenos hábitos de cepillado.
Sin duda, además de la estética, la higiene bucodental es necesaria para evitar caries e infecciones. Cepillarse los dientes después de cada comida es un consejo tan antiguo como acertado.
Pero cuando postergamos el cepillado, se produce una acumulación de sarro en la superficie de los dientes, y en los espacios entre ellos. El sarro también afecta el tono del diente, que puede ser cada vez más amarillento a medida que olvidamos pasar correctamente el cepillo y el hilo dental.
Ahora bien, tener los dientes amar