Antonia Monjo, “Toñi”, ingresó en el Hospital Casaverde Extremadura (Mérida) el 17 de julio, tras sufrir un ictus isquémico que transformó su vida de manera repentina. Desde entonces, se ha enfrentado con fuerza y valentía a un proceso de rehabilitación integral en las áreas de Terapia Ocupacional, Fisioterapia y Logopedia, logrando avances muy significativos en su autonomía e independencia personal.
El 1 de julio, T oñi sufrió un ictus que la mantuvo ingresada en la UCI. Tras un breve paso por la planta del hospital, fue derivada al Hospital Casaverde Extremadura, centro especializado en neurorrehabilitación concertado con el Servicio Extremeño de Salud (SES) . Aquí es donde Toñi ha empezado de cero. Tras el ictus apenas podía andar ni comunicarse, y se alimentaba mediante sonda nasog