
Mientras el secretario de Salud y Servicios Humanos Robert F. Kennedy Jr continúa desmantelando la política federal de vacunación, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) enfrentan una creciente tensión, mientras que varios estados gobernados por demócratas han decidido actuar por su cuenta, estableciendo nuevos sistemas para evaluar la evidencia científica y mantener el acceso a la inmunización para sus residentes.
Cuatro estados del oeste —California, Hawaii, Oregon y Washington— han formado una alianza para proteger el acceso a las vacunas . Varios estados del noreste han tomado medidas similares.
La gobernadora de Nueva York declaró una “ emergencia por desastre en todo el estado”, lo que permite a los farmacéuticos aplicar vacunas contra covid-19 sin necesidad de una receta médica. Minnesota hizo un cambio similar y Massachusetts ahora exige que las aseguradoras cubran las vacunas recomendadas por su departamento de salud estatal y no solo aquellas sugeridas por los CDC.
Estos cambios representan un giro importante en la autoridad de salud pública, que pasa del gobierno federal a los estados. Tradicionalmente, los estados han recurrido a los CDC como fuente de orientación experta en temas de salud pública, entre ellos vacunas, seguridad en el trabajo, fluoración del agua, infecciones de transmisión sexual y vapeo.
Ahora, ante la preocupación de que Kennedy está debilitando la confianza en las vacunas y en la ciencia de salud pública, algunos estados están explorando nuevas rutas, buscando otras fuentes de consenso científico y modificando cómo regulan a las aseguradoras, a los profesionales de la salud que recetan y a los farmacéuticos.
Colorado ha estado a la vanguardia de este movimiento. El 3 de septiembre, funcionarios estatales emitieron una orden permanente que permite a los farmacéuticos aplicar vacunas contra covid sin necesidad de recetas individuales .
“No voy a permitir que trámites ridículos y costosos, ni decisiones tomadas desde lejos en Washington, impidan que los habitantes de Colorado accedan a las vacunas”, dijo el gobernador demócrata Jared Polis .
Pero el liderazgo de Colorado ya venía preparando el terreno desde hacía meses para lograr mayor autonomía en cuanto a la política de vacunación.
En marzo, la legislatura estatal cambió una ley para que el estado pudiera considerar fuentes científicas distintas al gobierno federal al momento de establecer los requisitos de vacunación escolar.
“Era evidente que esto se estaba volviendo un tema político y no una cuestión basada en ciencia real, con este nuevo director del HHS”, dijo el senador estatal Kyle Mullica .
Mullica, quien copatrocinó la nueva ley, es demócrata y trabaja como enfermero en una sala de emergencias en el área de Denver.
Colorado es uno de los primeros estados en cambiar sus leyes para poder recomendar vacunas basándose en fuentes distintas a los CDC. La junta estatal de salud ahora también puede consultar a organizaciones médicas líderes como la Academia Estadounidense de Pediatría , la Academia Estadounidense de Médicos de Familia y el Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos .
“Decidimos proteger a Colorado”, dijo Mullica, para que el estado “no quedara tan vulnerable a la agitación política que estamos viendo en este momento”.
La legislatura estatal, de mayoría demócrata, aprobó el proyecto de ley casi en votación partidaria. Polis lo firmó en abril, pese a haber elogiado la elección de Kennedy el otoño pasado.
“Creo que Colorado está marcando el camino en este tema”, dijo el doctor David Higgins , pediatra de la Universidad de Colorado que formó parte del grupo de trabajo que ayudó a redactar el proyecto de ley.
Higgins señaló una ley complementaria , firmada en mayo, que —dijo— refuerza aún más el impulso de Colorado. Esta ley se enfoca en la cobertura de servicios de salud preventiva y busca garantizar que los planes médicos regulados por el estado cubran el costo de ciertas vacunas, sin importar las decisiones futuras de los CDC.
“En la práctica, la idea es ayudar a asegurar que los habitantes de Colorado sigan teniendo acceso a las vacunas”, explicó.
La oficina en Colorado de Children’s Health Defense, el grupo antivacunas que Kennedy dirigía antes de asumir el cargo en el HHS, no respondió a la solicitud de comentarios.
Otra copatrocinadora de la primera ley, la representante estatal demócrata Lindsay Gilchrist , dijo que la circulación de tanta información falsa sobre las vacunas —incluidas las del covid— hace que sea más importante escuchar a una variedad de expertos médicos confiables.
Hasta ahora, Colorado había recurrido a los CDC para recibir orientación científica sobre vacunas, especialmente para niñas y niños en edad escolar. Como otros estados, seguía las recomendaciones de un panel de los CDC conocido como el Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización (ACIP).
Kennedy despidió a los 17 miembros de ese comité en junio y los reemplazó por 12 nuevas personas, algunas de las cuales, según críticos, son escépticas de las vacunas y no estarían calificadas para brindar orientación clave a la población estadounidense.
“Creo que donde habrá confusión será en la diferencia entre las recomendaciones del ACIP, al que tradicionalmente seguimos, y las de todos los demás”, dijo el doctor Ned Calonge, director médico de Colorado.
Calonge espera que las asociaciones profesionales de médicos a las que ahora puede recurrir el estado tengan una guía similar en general y que “revisen las últimas recomendaciones basadas en evidencia que había dado el ACIP” antes del cambio de miembros.
En mayo, Kennedy anunció que el gobierno federal había eliminado las vacunas contra covid de la lista de inmunizaciones recomendadas para personas embarazadas sanas y para niños.
Pero Colorado sigue recomendando la vacuna contra covid durante el embarazo, indicó Calonge.
“No hay nueva evidencia que indique problemas de seguridad en esa población”, dijo . “Así que estamos diciendo a los proveedores que nuestra recomendación es seguir lo que se sugería en enero de 2025”.
En un comunicado en su sitio web, el Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos recomienda firmemente que las personas embarazadas se vacunen contra covid. “El ACOG sigue recomendando que todas las personas embarazadas y en período de lactancia reciban una vacuna actualizada contra covid-19 o una dosis de refuerzo”, indica el texto.
Del mismo modo, la Academia Estadounidense de Pediatría recomendó en agosto que todas las niñas y niños de entre 6 y 23 meses se vacunaran contra covid, así como los mayores que pertenecen a ciertos grupos de riesgo.
Por ahora, Colorado sigue las mismas recomendaciones de vacunación que aplicaba el año pasado.
La reunión más reciente del ACIP, realizada el 18 y 19 de septiembre, fue caótica . Algunos miembros admitieron no entender qué estaban votando, e incluso decidieron repetir una votación sobre el acceso pediátrico a la vacuna MMRV.
La próxima reunión del ACIP está programada para el 22 y 23 de octubre y podría traer más cambios en las recomendaciones de vacunación.
Médicos y especialistas en vacunas han expresado preocupación ante la pérdida del consenso nacional en torno a las vacunas.
“Ahora habrá mucha más confusión y desconfianza en las vacunas entre el público”, dijo la doctora Allison Kempe , profesora de pediatría en la Escuela de Medicina de la Universidad de Colorado, quien formó parte del ACIP entre 2013 y 2018.
Aun así, dijo que le alegra que Colorado esté avanzando con sus propias recomendaciones.