Cambio y Paz son las dos palabras alrededor de las cuales giran no solo los debates sino la realidad y la preocupación de los colombianos.
Se ha desfigurado esto convirtiéndolo en un tema de Uribe y Petro, o, a un nivel más abstracto, entre izquierdas y derechas.
Y claro qué hay una confrontación de ideologías, y claro que se concretan -o las concretan- alrededor de encarnarlas en personas.
Pero cada uno de esos conceptos -cambio y paz- genera actitudes diferentes según las condiciones de quien se refiere a ellas, o según como las afecta.
En principio el cambio inevitablemente tiende a profundizar diferencias entre aquellos que se benefician y quienes se perjudican. Es decir, se crea una dinámica de confrontación que, aunque es inevitable, depende de la actitud, de la forma en que las