Nos platican que varios se hacen en Veracruz “la pregunta del millón de pesos”: ¿por qué andan tan invisibles los funcionarios estatales en medio de la crisis por las inundaciones cuando más se les necesita? Nos explican que todo tiene una razón de ser y es que la gobernadora Rocío Nahle García (Morena), en su afán por tener el control de todo, tiene “aterrorizados” a sus principales colaboradores, los cuales “no pueden mover un dedo” sin su autorización y ¡ay de aquel que lo haga!, porque “se lleva la regañada de su vida”, pues doña Rocío tiene que aprobar, desde la emisión de declaraciones públicas, hasta cada contratación que se hace y, en esta emergencia, qué hacer o decir y qué no hacer o decir. ¿No que ahora “el pueblo manda”?
Quiere ver “si la cuarta es la buena”
El que reaparec