El pasado domingo, Madrid volvió a rendirse a César Rincón . Dieciocho años después de su última actuación en Las Ventas —y cuando parecía que el capítulo estaba cerrado tras su retirada oficial en Barcelona en 2007 y su adiós definitivo en Bogotá en 2008—, el maestro colombiano regresó para participar en el festival homenaje a Antoñete organizado por Morante de la Puebla. Su toreo volvió a estremecer a la afición venteña, sorprendiendo con una actuación plena de torería, temple y sentimiento, rubricada con dos orejas que confirmaron que la leyenda sigue viva.
En conversación con El Albero de COPE.es , el maestro confesó estar " fascinado, vivo en un sueño. La afición de Madrid me recibió con una ovación indescriptible, se me puso un nudo en la garganta. El cariño de Madrid es alg