Lo confirmó, en una entrevista con Blu, el ministro de Defensa, Pedro Sánchez. “Ese contrato va acorde a todos los pasos que se deben llevar a cabo para hacer una compra de esa envergadura”, explicó. La adquisición de los 18 aviones para la Fuerza Aérea asciende a 16 billones de pesos y es una de las compras públicas más grandes del país. Aún así, el ministro afirmó que la compra ya está asegurada y que no afecta el presupuesto del próximo año.

El contrato se firmará con Saab, una empresa sueca que, según Petro, aseguraría que el país “tenga una fuerza pública independiente”. El presidente se decantó por esa compañía, luego de descartar los aviones americanos F-16.

Una independencia poco tangible. La decisión de contratar con los suecos no es del todo independiente de países como Israel

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