Este sábado, la siempre bella Helena Boyra celebra sus 64 años con una sonrisa que irradia felicidad, alimentada por su flamante relación con José Ramón Fernández Rubíes, un empresario carismático del mundo de las finanzas, que se codea con la élite madrileña. Helen, licenciada en Derecho y letrada de las Cortes, con una oposición ganada a pulso que la llevó a ejercer en el Senado y a conocer al que sería su marido, el socialista José Federico de Carvajal, lleva años con un perfil bajo, pero sigue trabajando en lo que más le gusta. Pocos saben que es directora de Relaciones Internacionales del Congreso de los Diputados. Ella se encargó de todos los aspectos protocolarios y de la organización de uno de los eventos más solemnes y relevantes de la década, el juramento de la Constitución por

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