Desde diciembre de 2023, la Provincia de Santa Fe decidió librar una batalla silenciosa: la que no se combate con armas ni patrulleros, sino con leyes, expedientes y resoluciones judiciales. El Gobierno Provincial modificó su Ley Penitenciaria, creó la figura del “interno de alto perfil” y endureció los controles dentro de los establecimientos carcelarios. El resultado es un cambio estructural que limita el poder de las organizaciones criminales tras las rejas.
“Antes de esta ley, los presos más peligrosos vivían como querían dentro de la cárcel, y a los agentes penitenciarios se les hacía casi imposible mantener el control”, explicó María Florencia Blotta, subsecretaria de Relaciones con el Poder Judicial. Y añadió: “No podemos relajarnos, porque esto no está terminado. Por eso necesitam