A través de un mensaje en el móvil estando en el trabajo es como Gema Rubio conoció el diagnóstico de su cáncer de mama hace dos años. Esta murciana de 40 años ha pasado desde entonces la etapa más dura de su vida luchando contra un cáncer hormonodependiente HER2+ que le ha llevado a pasar por quimioterapia, radioterapia y una mastectomía con la que ha perdido su pecho derecho.
Ahora, aún con el miedo en el cuerpo por si la enfermedad reaparece y mientras sigue un tratamiento preventivo al que estará enganchada durante varios años más, intenta rehacer su vida e iniciar un proyecto laboral que le llena de ilusión, esa emoción que transmite cuando habla de su gran pasión: el yoga . Ahora, esta pasión estará ligada a la enfermedad oncológica que le ha marcado y lo hará inten