La medicina no siempre lo ha tenido claro, pero ahora sabemos que, lo primero, es no hacer daño. Cuanto menos invasivo sea un procedimiento, mejor, y si algo se puede curar por sí solo, debemos contemplar esa posibilidad antes de remangarnos la bata. En esa línea, las cirugías se han ido haciendo más… minimalistas, y donde antes sajaban a golpe de escalpelo, ahora punzamos con pequeños tubos para operar desde el interior. Es una buena noticia, una moda positiva que sigue en desarrollo. Continuando esa tendencia, algunos investigadores se han propuesto desarrollar diminutos robots que naveguen dentro de nuestro cuerpo y el último lo ha acaba de presentar la Universidad Estatal de Carolina del Norte.
El invento ha sido anunciado en la revista Advanced Functional Materials y, a simple