Un periodista de investigación croata ha presentado una denuncia ante la fiscalía de Milán contra el presidente de Serbia, Aleksandar Vučić, por su supuesta implicación en el asunto de los “safaris de Sarajevo ” emprendidos supuestamente por francotiradores italianos y de otros países en la capital bosnia para matar civiles durante el sitio de la ciudad entre 1992 y 1996. “Nunca he matado ni herido a nadie ni he hecho algo parecido. Han mentido sobre mí como francotirador en Sarajevo durante 10-20 años y siguen mintiendo”, respondió Vučić a los medios en Belgrado.

Los fiscales de Milán emprendieron la semana pasada una investigación para identificar a los italianos que pudieran estar implicados en casos de asesinato, con las agravantes de crueldad y motivos abyectos.

Grupos de “francotiradores turistas” participaron presuntamente en asesinatos masivos tras pagar grandes sumas a soldados del ejército de Radovan Karadžić —el antiguo líder serbobosnio que en 2016 fue declarado culpable de genocidio y otros crímenes contra la humanidad— para ser transportados a las colinas que rodean Sarajevo y disparar a la población a placer, según los investigadores.

Una mujer corre a refugiarse del intenso fuego de los francotiradores serbios en Sarajevo el 11 de junio de 1995.

Más de 10.000 personas murieron bajo la artillería y los disparos de francotiradores durante los cuatro años de asedio, que supuso el sitio más largo de la historia moderna, después de que Bosnia y Herzegovina declarase la independencia de Yugoslavia.

Los francotiradores fueron posiblemente el elemento más temido por los vecinos durante el sitio de Sarajevo porque disparaban a la gente en las calles sin distinción, incluso a los niños.

La investigación partió de una denuncia presentada por Ezio Gavazzeni, un escritor milanés que recogió pruebas de las acusaciones, así como de un informe enviado a los fiscales por la exalcaldesa de Sarajevo Benjamina Karić.

Gavazenni declaró que había leído informaciones sobre los supuestos francotiradores turistas en la prensa italiana en los 90, pero que solo empezó a investigar tras ver el documental de 2022 Sarajevo Safari, dirigido por el esloveno Miran Zupanič.

El joven Vučić, en el lugar del crimen

El periodista de investigación Domagoj Margetić presentó el miércoles la denuncia contra Vučić ante los fiscales encargados del caso.

La prensa de Sarajevo informó estos días de las pruebas publicadas por Margetić en redes sociales de que Vučić, entonces un joven voluntario, estaba presente en uno de los destacamentos militares de la ciudad desde los cuales, según los testigos, unidades serbias acompañadas de extranjeros disparaban a matar a los civiles, en lo que se ha dado en llamar un macabro “safari turístico”.

En varias publicaciones en Instagram, el periodista afirmó que Vučić declaró en una entrevista con medios de Belgrado en 1994 que, durante los 'safaris humanos' en Sarajevo, había estado en uno de los puestos más exclusivos a los que llegaban esos “monstruosos turistas” para “cazar” personas.

Luego publicó un video grabado en un puesto del Cementerio Judío de Sarajevo, considerada una de las ubicaciones “más atractivas” para disparar, en el que aparecen el criminal de guerra Vojislav Seselj y Vucic. Según Margetic, el actual presidente de Serbia evitaba las cámaras porque llevaba un rifle en la mano.

Nicola Brigida, un abogado que ayudó a Gavazzeni a preparar el expediente, indicó: “Las pruebas acumuladas tras la larga investigación [de Gavazzeni] están muy sustanciadas y podrían dar pie a una investigación seria para identificar a los culpables. También está el informe de la exalcaldesa de Sarajevo”.

Dos mujeres caminan por la "avenida de los francotiradores· de Sarajevo en 1993.

Italianos, franceses e ingleses

Gavazenni afirmó que “muchos, muchos, muchos italianos” están supuestamente implicados, aunque no dio una cifra. “Había alemanes, franceses, ingleses... Gente de todos los países occidentales que pagó grandes sumas para que los llevasen a disparar a civiles”, acusó.

El abogado añadió: “No tenían motivación política ni religiosa. Eran ricos que fueron para divertirse y por satisfacción personal. Hablamos de amantes de las armas que quizás fuesen a campos de tiro o a safaris en África”.

Gavazzeni alegó que los italianos supuestamente implicados se reunían en la ciudad de Trieste para viajar a Belgrado, desde donde soldados serbobosnios los llevaban a las colinas de Sarajevo.

“Había un tráfico de turistas de guerra que iban allí a disparar a gente”, indicó. “Yo lo llamo indiferencia ante el mal”, describió.

“Nunca he tenido un rifle de francotirador en las manos, ni siquiera aquel rifle del que hablan, porque eso era un trípode de cámara. ¡Qué vergüenza!”, declaró el mandatario serbio tras hacerse pública las acusaciones, según recoge EFE. “No hay palabra que no hayan dicho para presentarme como un monstruo, un asesino frío”, dijo Vučić, que años atrás sostuvo que llevaba un paraguas. Los rumores respecto de la actuación del presidente serbio por Sarajevo llevaban años circulando.

Con información de Agencias.