La conversación en redes sobre el llamado “Registro Nacional de Infieles” ha pasado de la burla al desconcierto jurídico.
Lo que comenzó como una cadena viral para exponer supuestas historias sentimentales, terminó abriendo un debate sobre los riesgos legales que enfrentan quienes aportan, administran o comparten esa información.
En palabras de una abogada creadora de contenido que aborda temas legales en TikTok, quienes participan en esta dinámica “se van a meter en un problema tan harto”.
Un archivo viral que no dejó de circular pese a ser eliminado
El punto de partida fue un archivo que comenzó a moverse a inicios de noviembre y que organizaba nombres, fotos, redes sociales y otros datos de presuntos involucrados, separados por departamentos.
Aunque el documento original fue re

Semana Tecnología

Semana
Infobae Colombia
Caracol
The Conversation