
Este jueves, el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, recibió en el Palacio de Carondelet, en Quito, al secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio.
Tras ese encuentro, tanto Rubio como la canciller de Ecuador, Gabriela Sommerfeld, ofrecieron una conferencia de prensa en la que indicaron que uno de los temas principales del encuentro fue el de "seguridad". El funcionario estadounidense, además, planteó que existe la posibilidad de " estacionar elementos militares de EE.UU. en el territorio (ecuatoriano)", lo que, según él, "crea oportunidades para poder cooperar conjunto, entrenar en conjunto y enfrentar una amenaza" que tienen en común.
Esto planteó, una vez más, la interrogante sobre si EE.UU. volverá a instalar una base militar en Ecuador, como la que estuvo en la ciudad de Manta, en la provincia costera de Manabí. Sobre ello, dijo que "Ecuador es un país soberano" y si le extiende la invitación lo van a "considerar".
"Si nos invitan a regresar, es un punto muy estratégico, lo vamos a estudiar, a ver si tiene sentido , si los ayuda también con lo que están enfrentando", indicó, al enumerar delitos como la minería ilegal, el "narcoterrorismo" o la pesca ilegal.
Insistió en que lo considerarían porque la invitación vendría de parte de "un aliado", "un amigo" y, además, reconoció que Ecuador es "un lugar estratégico, muy estratégico".
Pero para que la invitación se haga, aún hay un camino por recorrer, puesto que en Ecuador actualmente están prohibidas las instalaciones de bases militares extranjeras, algo que Noboa busca revertir.
10 años
El Puesto Operativo de Avanzada (FOL, por su siglas en inglés) de EE.UU. operó en Manta durante 10 años. Se instaló en 1999, bajo el gobierno de Jamil Mahuad (1998-2000), y, al igual que lo que se ha insistido actualmente para su retorno, su propósito era la lucha contra el narcotráfico.
Sin embargo, eso trajo consigo problemas y rechazo de algunos sectores. Según un informe de la Coalición No Bases, publicado en el repositorio de la Defensoría del Pueblo, esa base fue "un enclave ilegal e ilegítimo de militares estadounidenses que gozaban de inmunidad" y "cuyas acciones vulneraron la soberanía nacional"; señala que "más que un control antinarcóticos, realizó operaciones de control migratorio y lucha antiterrorista; es decir, se convirtió en un apoyo al gobierno colombiano en su política militarista".
Pero, además, según la coalición, desde su instalación, "se develaron algunos conflictos: aumento de trabajadoras sexuales, desalojo a familias campesinas, hundimiento de barcos pesqueros y la desaparición de pescadores, la interdicción de buques con migrantes, las limitaciones a las faenas de pesca por razones de 'seguridad' y el riesgo para las poblaciones cercanas a los polígonos de tiro".
En 2008, bajo el mandato de Rafael Correa (2007-2017), se aprobó una nueva Constitución en Ecuador. En la nueva carta magna, que fue el resultado de una Asamblea Constituyente, estableció en el artículo 5 lo siguiente: "El Ecuador es un territorio de paz. No se permitirá el establecimiento de bases militares extranjeras ni de instalaciones extranjeras con propósitos militares. Se prohíbe ceder bases militares nacionales a fuerzas armadas o de seguridad extranjeras".
Así, Correa no renovó el contrato firmado con Washington, que finalizaba en 2009; y en septiembre de ese año, los militares de EE.UU. se retiraron de la base de Manta.
"Nos pidieron que nos fuéremos, en los años de Correa y nos fuimos" , mencionó Rubio al respecto en la conferencia de prensa de este jueves.
Las gestiones de Noboa
El año pasado, Noboa revivió la idea de permitir en Ecuador la instalación de bases militares extranjeras y envió ante la Asamblea Nacional una propuesta de reforma de la carta magna para eliminar el impedimento, una vez recibió el visto bueno de la Corte Constitucional.
El pasado 3 de junio, la Asamblea Nacional de Ecuador aprobó la modificación del artículo 5 de la Constitución, reduciendo este a: "Ecuador es un territorio de paz" . Con el cambio se abre la puerta para que el Gobierno pueda autorizar la instalación de bases militares de otros países en el territorio ecuatoriano.
Sin embargo, para que la modificación sea efectiva aún falta que sea sometida a la voluntad del pueblo. Para ello, Noboa plantea que el referéndum constitucional, junto con una consulta popular, se lleve a cabo en diciembre próximo. La pregunta sobre las bases extrajeras para ese plebiscito ya fue validada por la Corte Constitucional.
Acuerdos con EE.UU.
Y mientras eso ocurre y se busca reformar la Constitución, Ecuador avanza con EE.UU. en cooperación con diversos acuerdos.
"Se ha acordado trabajar en conjunto (para) fortalecer las capacidades y las acciones para tener mayor control en la ruta de las drogas que afectan a nuestras naciones, luchar contra el lavado de activos a través del intercambio de información, apoyo con tecnología, equipamiento, trabajo en las fronteras, trabajo contra la minería ilegal y, sobre todo, estamos trabajando en un acuerdo de extradición, modernizándolo", dijo Sommerfeld en la conferencia de prensa.
Además, Rubio anunció que en esta misma jornada EE.UU. estaría designando a las organizaciones criminales ecuatorianas 'Los Lobos' y 'Los Choneros' como " grupos terroristas" .
Al respecto, el funcionario explicó que esa designación le permitirá a su país "ir en contra de los bienes, de las propiedades, el dinero de cualquier individuo en EE.UU. o en el sistema bancario estadounidense que esté relacionado con esos grupos"; pero, además, permite "compartir inteligencia" a Ecuador, para que ellos "se enfrenten a esos grupos".
Rubio también anunció la asignación de 13,5 millones de dólares a Ecuador "para combatir a la droga y al crimen", de parte del Departamento de Estado; y trabajan para también proveer 6 millones de dólares para drones, "para ayudar a las fuerzas navales de Ecuador a combatir".