El presidente de Estados Unidos amenaza a la ciudad desde hace semanas con desplegar la Guardia Nacional

Primero desplegó agentes federales y tropas en Los Ángeles. Después, en Washington DC. Ahora el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se prepara para —en sus palabras— “arreglar” Chicago, otra gran ciudad bajo gobierno demócrata , alcalde afroamericano y que se había declarado santuario para la inmigración. La medida, ha advertido el republicano, puede llegar “en el próximo día o dos”. Como anticipo, los agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), que ya habían reforzado su presencia en las cercanías de la metrópolis, han anunciado este lunes el inicio de una gran operación de redadas en sus calles para detener a migrantes irregulares.

La operación, apodada

See Full Page