No hubo milagro y, tal y como estaba anunciado, Francia vuelve a navegar en turbulencias políticas . La caída del primer ministro, en la que toda la oposición de izquierdas y ultraderecha había anunciado previamente su voto en contra –364 votos sobre 577 diputados– devuelve al país a la casilla de salida y muestra las costuras de un modelo político que ha entrado en una crisis, ya no sólo de Gobierno sino probablemente de régimen . La inestabilidad política está teniendo efectos en la economía del país, con una deuda disparada que el propio Bayrou ha intentado corregir mediante unos presupuestos con recortes draconianos que ya han levantado tensiones sociales con un movimiento convocado a través de redes sociales para bloquear Francia mañana miércoles.

Las miradas ahora se giran hacia

See Full Page