Dicen que el verdadero American Dream no está solo en New York o Miami, sino en cualquier rincón del planeta donde aparece una base norteamericana. Porque, let’s be honest, las bases yanquis son como Starbucks: vos pensás que estás en medio de la nada y, boom, aparece una con bandera de barras y estrellas.
Están en Alemania, Japón, Italia, Corea del Sur, y un montón de lugares más. Oficialmente, son para “seguridad global”. En la práctica, parecen un mix entre hard power y reality show: un pedazo de USA exportado, con hamburguesas, béisbol, y WiFi del Pentágono.
Para algunos países, son un “guarantee of freedom”; para otros, más bien un recordatorio de que el Tío Sam nunca viaja light. Porque si algo saben hacer los gringos es convertir cualquier geografía en un outlet mall de geopolític