Quizás esté ya todo dicho a estas alturas, pero si alguien esperaba que Volodímir Zelenski ofreciera algún tipo de perspectiva nueva sobre cómo forzar a Rusia a negociar de buena fe o o cómo inclinar la balanza a favor de Ucrania en el terreno militar, debió llevarse una decepción. En su intervención ante la Asamblea General de Naciones Unidas , el presidente ucraniano apenas se detuvo en la letra pequeña del conflicto que asuela su país. Prefirió, en cambio, llamar la atención sobre la carrera armamentística en curso o sobre cómo el sistema internacional ha dejado de proteger a las naciones. “No hay más garantías de seguridad que las armas y los amigos”, afirmó con resignación el dirigente ucraniano.
El discurso de Zelenski llegó solo unas horas después de que Donald Trump