La voz de Manuela Bedoya Jaramillo sonó entrecortada, pero firme. Del otro lado de la línea, la ministra de Relaciones Exteriores, Rosa Yolanda Villavicencio , intentaba transmitir alivio y cercanía después de cinco días de incertidumbre.
“Soy la ministra de Relaciones Exteriores, Yolanda. Quiero saludarlas y decirles que estamos muy contentas porque hemos logrado que salgan y que ustedes están bien. Quisiera saber cómo están, cómo se sienten”, dijo la canciller.
La respuesta fue breve y sincera: “Muchas gracias por el apoyo y por estar tan pendientes de nosotras, de verdad. Estamos agotadas, pero con la moral alta, porque ya estamos afuera y felices, queriendo regresar a casa ”, respondió Bedoya, mientras su compañera Luna Barreto Arango continuaba en gestiones con el cónsul col