El cierre del gobierno federal comenzó el 1 de octubre, después de que el Congreso fracasó en aprobar la ley del presupuesto, pero cuál ha sido el impacto en la ciudad y el condado de Los Ángeles. Hasta ahora ha sido mínimo, pero advierten que a medida que se prolongue este paro, los riesgos de dejar de proveer servicios críticos aumentan.
“Este cierre innecesario del gobierno federal pone en riesgo servicios y programas críticos, y crea incertidumbre financiera para miles de empleados federales en Los Ángeles y muchos más en todo el país, muchos de los cuales viven al día”, dijo la alcaldesa Karen Bass.
“Este Congreso, controlado por los republicanos, debe actuar para poner fin a esta crisis evitable”.
Afirmó que como Alcaldesa, hará todo lo posible para asegurarse de que los trabajado