**Ábalos en la cuerda floja: ¿Prisión inminente?**
El exministro de Transportes, José Luis Ábalos, se ha presentado este miércoles ante el Tribunal Supremo, donde ha decidido no declarar ante el juez Leopoldo Puente. Ábalos está siendo investigado por su presunta implicación en una trama de adjudicaciones irregulares de contratos públicos durante su gestión. Las acusaciones populares han solicitado nuevamente su ingreso en prisión, aunque esta medida no ha sido respaldada por el fiscal jefe Anticorrupción, Alejandro Luzón.
Ábalos llegó al tribunal en taxi, como en ocasiones anteriores, pero esta vez sin su abogado, Aníbal Álvarez, a quien renunció por "diferencias irreconducibles" en su estrategia de defensa. Sin embargo, el juez Puente anuló esta decisión, considerándola un "fraude de ley". Durante su comparecencia, Ábalos justificó su silencio al sentirse indefenso sin un letrado de confianza.
El fiscal Luzón argumentó que no hay cambios en las circunstancias que justifiquen el ingreso en prisión del exministro, a pesar de que los indicios en su contra han aumentado. Durante la audiencia, se le pidió que explicara su patrimonio y gastos personales, en relación con un informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que reveló "ingresos irregulares".
La situación de Ábalos es crítica, ya que por primera vez enfrenta un riesgo real de prisión preventiva. Desde junio, el caso cuenta con un preso, Santos Cerdán, exsecretario de Organización del PSOE, quien está en prisión por su posible manipulación de pruebas. El juez Puente deberá evaluar si se solicita formalmente la prisión de Ábalos, considerando el riesgo de fuga y la reiteración delictiva.
La defensa de Cerdán ha intentado aplazar la audiencia, argumentando compromisos en otras causas, pero el magistrado ha desestimado la solicitud. Por su parte, Koldo García, exasesor de Ábalos, ha solicitado la nulidad de las actuaciones judiciales, alegando que se investigan hechos distintos a los autorizados.
La decisión del juez Puente sobre el futuro de Ábalos dependerá de las conclusiones que extraiga tras la audiencia y el análisis del informe de la UCO sobre su patrimonio, así como de las explicaciones que pueda ofrecer sobre los 95.427 euros de origen desconocido que utilizó para sus gastos personales. La tensión en torno a este caso sigue en aumento, y la próxima decisión del tribunal será crucial para el exministro.