Crece la tensión en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). El vocal José María Fernández Seijo, uno de los ocho que fueron elegidos hace un año a iniciativa del PSOE, amenaza con renunciar al cargo, según ha adelantado El Mundo . Distintas fuentes consultadas por elDiario.es confirman que el vocal ha presentado una carta de dimisión a la presidenta, Isabel Perelló, si bien sus compañeros de grupo se están movilizando para que reconsidere su decisión. Un portavoz oficial del CGPJ afirma que, por el momento, en el Registro del órgano no consta ninguna carta de renuncia de este vocal. 

Fernández Seijo es juez de lo Mercantil de Barcelona. Fue pionero en llevar los desahucios y las cláusulas hipotecarias abusivas a los tribunales europeos. Está asociado a Juezas y Jueces para la Democracia. Durante el mandato, había ejercido como líder en la sombra del grupo. Su posible dimisión supone “un roto enorme”, explica un vocal propuesto por el PSOE. 

Esta mañana nueve vocales progresistas —incluido Fernández Seijo— han difundido un duro comunicado en el que acusan a la presidenta Perelló de haber impuesto de “manera abrupta y deliberada” un cambio de reglas que les “excluye” en el nuevo reparto de poder del órgano de gobierno de los jueces. 

El origen del conflicto está en la nueva composición de las distintas comisiones en las que se organiza el trabajo del órgano. Esa composición fue aprobada este jueves con los votos del grupo conservador, la presidenta y uno de los vocales elegidos a iniciativa de Sumar Carlos Hugo Preciado. 

Con el nuevo reparto, nueve de las once comisiones tienen mayoría conservadora. Entre ellas, la más relevante, la Permanente, una especie de núcleo duro donde se toman muchas decisiones de calado. Los progresistas tenían una propuesta que se acabó retirando. Ni siquiera se llegó a votar. Proponían que este bloque –que hasta ahora estaba en minoría en la Permanente– pasara a tener mayoría: cuatro vocales progresistas y tres conservadores. Esa propuesta también suponía la entrada de Fernández Seijo. 

La ley del Poder Judicial recoge que los vocales “sólo” cesarán de sus cargos por el transcurso de los cinco años para los que fueron nombrados, por “renuncia aceptada” por el presidente o por incapacidad, incompatibilidad o incumplimiento grave de los deberes del cargo, apreciadas por los tres quintos del pleno. Esto es, su renuncia en ningún caso será automática, dado que tiene que ser aceptada por la presidenta.