Alemania y el Reino Unido han lanzado una fuerte advertencia sobre la creciente amenaza que representan los satélites espaciales de Rusia y China. Estos satélites han sido detectados espiando a los satélites utilizados por potencias occidentales, lo que ha generado preocupación en la comunidad internacional.

En una reciente conferencia de líderes de la industria espacial en Berlín, el ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, afirmó: “Las acciones de Rusia, especialmente en el espacio, representan una amenaza fundamental para todos nosotros. Una amenaza que ya no podemos ignorar.”

Las advertencias se producen en el contexto de la invasión rusa a Ucrania, que ya lleva tres años. Funcionarios ucranianos han señalado que Moscú ha intensificado su cooperación con China, que realiza reconocimientos satelitales del territorio ucraniano en nombre de Rusia.

Pistorius destacó que se han detectado satélites de reconocimiento rusos rastreando satélites de IntelSat, utilizados por las Fuerzas Armadas alemanas y sus aliados. “Rusia y China han expandido rápidamente sus capacidades de guerra espacial en los últimos años: pueden interferir, cegar, manipular o destruir cinéticamente satélites”, añadió el ministro, anunciando un aumento significativo en la financiación de los programas espaciales alemanes.

El jefe del Comando Espacial del Reino Unido, el general de división Paul Tedman, también expresó su preocupación, afirmando que los satélites rusos están acechando los activos británicos en el espacio y que intentan recopilar información de ellos. “Tienen a bordo cargas útiles capaces de detectar nuestros satélites”, declaró Tedman.

Además, el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, advirtió sobre los planes de Rusia para desarrollar armas nucleares en el espacio, con el objetivo de inutilizar y destruir satélites. Aunque el presidente ruso, Vladímir Putin, ha negado la intención de desplegar armas nucleares en el espacio, Rusia vetó una resolución de la ONU que instaba a no desarrollar tales armas.

Los expertos han señalado que, aunque es relativamente sencillo detectar satélites extranjeros, es complicado determinar sus capacidades e intenciones. Clayton Swope, del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, explicó que las autoridades hacen suposiciones sobre la intención de los satélites rusos basándose en su ubicación y patrones históricos.

Swope también mencionó que los satélites rusos que se acercaron a los satélites IntelSat estaban allí para interceptar señales. “Es muy difícil distinguir entre una amenaza en el sentido de un arma y una amenaza en el sentido de la recopilación de inteligencia”, añadió.

La amenaza de Rusia no es nueva. Estados Unidos y Francia ya habían advertido hace más de una década sobre el espionaje de satélites rusos. En 2015, el Departamento de Defensa de EE.UU. informó que un satélite militar ruso se había situado cerca de satélites Intelsat, lo que llevó a consultas con Moscú.

Por otro lado, los expertos también han señalado que China representa una amenaza significativa. Juliana Suess, investigadora del Instituto Alemán de Asuntos Internacionales y de Seguridad, indicó que las maniobras chinas en el espacio han causado gran preocupación en Occidente. “La potencia espacial mucho mayor es, obviamente, China”, concluyó Suess.

La situación en el espacio se vuelve cada vez más tensa, y las potencias occidentales están en alerta ante las acciones de Rusia y China en el ámbito espacial.