Elena y sus hijos Aina y Miquel Àngel tuvieron que dejar su hogar ayer por la mañana, porque así lo exigía una orden judicial de desahucio . Se trata de un local ubicado en la calle Sureda, 11 de Porto Cristo .

Ella y sus hijos vivían juntos porque las cosas no les iban muy bien. Elena hace ya medio año que no trabaja y sus dos hijos tampoco, y no pueden permitirse pagar el alquiler en una vivienda digna .

Ayer, cuando ya estaban en la calle, Elena explicó la situación en que se encuentra: «Soy una mujer maltratada por mi ex-marido y mis hijos también han sido agredidos por su padre, por este motivo, hay una orden de alejamiento y él no se puede acercar a nosotros». Elena comenta que «me quedé sin trabajo y desde hace seis meses no pago el alquiler p

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