Serían más de 10 las personas agraviadas que creyeron en la abogada Sheilla Benites y le confiaron su dinero para un negocio de compra de casas vía remate judicial que luego las vendería.
Cara a cara se vieron en la Subprefectura de Chimbote dos trabajadoras judiciales frente a una ex compañera de labores a la que acusan de haberlas estafado con fuertes sumas de dinero que le entregaron para un negocio inmobiliario del cual no han obtenido beneficio y no les devuelve su dinero a pesar de los reiterativo pedidos.
Las dos servidoras de la Corte Superior de Justicia del Santa dijeron a través de su abogada Rocío Acosta Saavedra que la ex trabajadora judicial Sheilla Benites recibió de una de sus patrocinadas 20 mil dólares y de la otra 60 mil dólares para la compra de viviendas vía remate j