El durazno es una de las frutas que más se disfrutan entre la primavera y el verano. Su sabor y frescura hacen que se vuelva un importante aliado para los días calurosos y sean de las más elegidas durante estos meses.
Sin embargo, hay un detalle que no pasa desapercibido en esta fruta. Se trata de la pelusa que recubre su piel , la cual muy pocos conocen cómo se llama y para qué sirve.
Los “pelitos” que se encuentran en la cáscara del durazno se conoce como tricoma , que funcionan como un mecanismo de defensa para estas frutas.
¿Para qué sirve la “pelusa” del durazno?
La función principal de la “pelusa” es proteger al durazno de insectos , hongos y del exceso de sol . Actúa como una barrera natural que ayuda a mantener la fruta sana durante su crecimiento.
Además,