Con la noticia de los tres millones de espectadores consolidados en la temporada 24-25, que ya se alcanzaron el curso anterior, la XXIV gala Catalunya Aixeca el Teló tenía todos los ingredientes para ser la gran fiesta de las artes escénicas. Y así fue. En el Gran Teatre del Liceu, bajo el título On tot és possible, la gala contó con la dirección de Joan Arqué, la colaboración de Jaume Viñas, y con un maestro de ceremonias de lujo, Jordi Oriol, autor de sus intervenciones.
Rimando y jugando hasta el límite con las palabras, Jordi Oriol, armado en clara alusión al conflicto de Gaza, trenzó una gala a veces surrealista, homenaje a todas las artes escénicas, a la que acudieron el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, el presidente del Parlament, Josep Rull, y el ministro de Cultura,