La premura con la que el Ejecutivo y Parlamento actuaron para decantarse por esta medida, contrasta con la prudencia con la que hasta hace solo dos semanas abordaron el asunto, casi en simultaneo con la publicación del reglamento de la Ley de reforma aprobada un año atrás por el Congreso.
Aunque perfectible, esa norma permitía abrigar esperanzas entre los expertos en materia previsional acerca de un sistema de pensiones más sostenible, pues, entre sus principales bases, se prohibían los retiros extraordinarios de fondos de AFP y la disponibilidad del 95.5% del ahorro pensionario en la jubilación, y se introducía la obligación de los trabajadores independientes a aportar para su jubilación, además de fomentar una mayor competencia.
Ayer, junto con la aprobación de la nueva liberación de