El Ministerio de Capital Humano ha dictado la conciliación obligatoria en el conflicto laboral que involucra al gremio ferroviario La Fraternidad y las empresas operadoras de trenes. Esta medida, que se enmarca en la Ley 14.786, tendrá una vigencia de 15 días y busca normalizar el servicio de trenes en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).

El conflicto se inició a la medianoche del miércoles, cuando el sindicato, liderado por Omar Maturano, implementó una protesta que limitó la velocidad de las formaciones de las líneas Roca, Mitre, San Martín, Sarmiento, Urquiza y Belgrano Sur a 30 kilómetros por hora. Esta acción provocó severas demoras en los ingresos y egresos a la Ciudad de Buenos Aires, afectando a más de un millón de pasajeros en plena semana laboral.

En un comunicado oficial, el Ministerio de Capital Humano indicó que el gremio había decidido retirarse de la mesa de negociaciones de manera intempestiva, lo que dificultó el diálogo. La resolución de conciliación obligatoria intimida al sindicato a suspender las medidas de acción directa bajo la advertencia de sanciones legales. El Ministerio subrayó que esta medida busca "resguardar el interés público" y "garantizar la continuidad de los servicios esenciales", sin desatender los derechos laborales ni los mecanismos de negociación colectiva.

La Fraternidad, por su parte, reclama una recomposición salarial y critica la falta de soluciones inmediatas a problemas de infraestructura. A pesar de los anuncios de inversiones por parte de Trenes Argentinos, el gremio considera que son insuficientes. Durante los próximos 15 días, ambas partes deberán retomar las conversaciones para intentar alcanzar un acuerdo que evite nuevas medidas de fuerza. La incertidumbre persiste sobre si el gremio acatará la conciliación obligatoria o si continuará el malestar que llevó a la ralentización de los trenes en los últimos días.